SIMA 2024, el día de la marmota especuladora.
Un año más, la codicia inmobiliaria se reúne en Madrid para apurar todo lo posible el mercado de viviendas y exprimir al máximo la renta de las familias. Al SIMA no vienen personas a buscar hogares, sino inversores a buscar activos, y ese es el principal problema. SIMA promueve la especulación con patrocinio de las administraciones, mientras en la calle se acumula la carestía de la vivienda y campan a sus anchas los abusos de inmobiliarias, fondos y promotores deseosos por obtener ingentes beneficios.
El actual mercado inmobiliario, que consume más del 40% de la renta media de las familias, deja fuera a todas las personas que carecemos de una vivienda en propiedad. El parque de vivienda pública en España es uno de los más débiles de toda Europa (1,5% de viviendas totales). Este raquítico parque en madrid consta de 48.000 viviendas para las casi 250.000 solicitudes. Esta situación nos aboca a la caridad, el hacinamiento, malas condiciones, subarriendos de habitaciones y a la ocupación de casas abandonadas.
Desde la Comunidad de Madrid se anuncia la construcción de miles de viviendas de alquiler asequibles bajo el “Plan Vive”, pero solo se adjudica una pequeña parte y a unos precios que siguen siendo inaccesibles para la mayoría de familias.
Incluso en los casos en los que logramos acceder a una vivienda pública, ni la Comunidad de Madrid (AVS) ni el Ayuntamiento (EMVS) se preocupan por los problemas de las familias. Muchos edificios están en mal estado y apenas se construyen nuevas promociones. Cuándo las construyen tampoco las ubican equitativamente en las distintas zonas de Madrid, sino en los barrios menos rentables para las inversiones privadas. Además, se comportan más como inmobiliarias, aumentando la falta de empatía y el maltrato institucional a familias y comunidades. Encima después muchas de estas viviendas terminan siendo vendidas a fondos para que sigan especulando con nuestras casas.
Por su parte, el Gobierno central sigue colaborando en la cadena especulativa como si no hubiéramos tenido varias crisis inmobiliarias. La SAREB (el banco malo) ha captado millones de inmuebles desde 2012, en los momentos de mayor auge de desahucios de familias por impagos de hipoteca y, sin embargo, no hay en sus estatutos ni en su gestión una palabra de contribuir a un parque público de viviendas.
Protesta en la entrega de premios de ASPRIMA en el Salón Inmobiliario de Madrid.23/05/2024
Igual que en sanidad se va degradando lo público para favorecer al sector privado, la vivienda pública está desaparecida como política central. Denunciamos la misma existencia de una feria de la especulación, que debería estar perseguida y exigimos medidas urgentes de salvamento de la vivienda pública:
1.- Aumento del parque de vivienda pública de Madrid para cubrir el total de solicitudes. Este plan debe incluir la construcción de vivienda pública y la obligación a fondos, inmobiliarias, bancos, SAREB y rentistas a ceder las viviendas ociosas.
2.- Distribución equitativa de la vivienda pública en todas las ciudades y barrios con independencia del nivel de renta.
3.- Limitación de las viviendas turísticas y reconversión en vivienda pública de las viviendas turísticas excesivas.
4.- Plan de mejora de los edificios y zonas comunes de las promociones de vivienda pública.
5.- Transparencia en los criterios de acceso y listas de espera. Facilidades para computar como solicitante. Impulso de la “declaración responsable” para agilizar trámites y reducir burocracia.
6.- Servicio de atención y mediación para la mejora de la convivencia y la prevención de conflictos, incluyendo planes de ocio y apoyo escolar para niños, niñas y jóvenes.
7.- Regularización de los casos de ocupación.
8.- Prohibición de venta de la vivienda pública a particulares,empresas o fondos buitre.
9.- Participación real de los inquilinos en la toma de decisiones sobre promociones, precios y medidas de defensa de la vivienda pública.
Irrupción de activistas en el Salón Inmobiliario de Madrid 24/05/2024
